Desde sus orígenes, la criminología ha estado marcada por el androcentrismo, y esto se traslada también a las prisiones, ya que estas han sido creadas por y para hombres. Con el surgimiento de la criminología crítica feminista se empiezan a considerar las posibles discriminaciones y condiciones en las que se encuentran las mujeres en prisión. El paso por prisión es difícil para cualquier persona, pero en el caso de las mujeres esto se acentúa, y más aún en aquellas que tienen que vivir su maternidad dentro de ellas. Analizaremos los establecimientos y módulos destinados a mujeres y madres, sus circunstancias e inconvenientes.