ARTÍCULO DE OPINIÓN: El fenómeno del "Movimiento Okupa" en España y la irrupción de las "Mafias de la Okupación"

Autor: Álvaro Galarza Cebrián

Resumen

     La historia nos muestra cómo las distintas crisis económicas han conllevado ostensibles cambios productores de efectos negativos. A colación, la crisis inmobiliaria del 2008 impactó duramente sobre la sociedad española, muchos empleos se perdieron y se produjo el auge de la pobreza. Situaciones que, en términos generales, supusieron un auténtico caldo de cultivo para el potenciamiento de movimientos sociales de índole reivindicativo con total disposición a mortificar y condenar la especulación inmobiliaria y todos los negocios en torno a la vivienda.

    Así las cosas, el “Movimiento Okupa”, presente en España aproximadamente desde el inicio de los años 80, esperaba agazapado su oportunidad de obtener cierta visibilidad a raíz de este hito histórico, lo que no preveían es que posteriormente la delincuencia organizada instrumentalizaría al “Movimiento” para fines propios.

     De este modo, a día de hoy se ha producido el potenciamiento de auténticos negocios en torno a la ocupación de inmuebles. Asimismo, también se ha observado un crecimiento de individuos, que pese a tener una amplia capacidad económica para poder alquilar o adquirir una vivienda, deciden ocuparla. La ocupación de viviendas, se consolida, por tanto, como uno de los grandes problemas que ha de afrontar España hoy en día.

Introducción

     El “Movimiento Okupa” se trata de un fenómeno de rabiosa actualidad, así pues, suscita un gran interés social puesto que la mayoría de la ciudadanía no conoce de dónde proceden esas conductas reivindicativas que muchas veces rompen con la legalidad. Las prácticas okupas, entendidas por aquellas reivindicaciones políticas, sociales y culturales materializadas en la usurpación de espacios a modo de protesta, están presentes en España desde aproximadamente los años 80, por lo que, no es que no estuvieran, sino que más bien nunca habían gozado de la visibilidad que los medios les están brindando a día de hoy.

     Por otro lado, las conocidas como “Mafias de la Ocupación”, también son una clara consecuencia de la crisis económica del 2008. Estas auténticas organizaciones criminales han sabido lucrarse de la situación a través de actividades basadas en el engaño de aquellos sujetos con bajos recursos económicos, la extorsión hacia los legítimos propietarios, las intimidaciones de comunidades enteras de vecinos y, una variopinta lista de muchas otras conductas totalmente alejadas de la legalidad.

    En este contexto surge a su vez un innovador negocio que contrataca y aborda directamente las prácticas okupas, la desocupación. Esta se trata de una actividad que emplean las empresas de seguridad privada y, sin duda alguna se trata de un negocio emergente cuya contratación por parte de los clientes a priori supone una clara agilización del proceso de recuperación de la vivienda. Dadas las circunstancias actuales, la existencia de este tipo de empresas supone un alivio para una gran cantidad de propietarios que encuentran en éstas una herramienta ante la ausencia de protección legislativa. No obstante, dichas prácticas también están siendo puestas en entredicho ya que han sido denunciados por prácticas abusivas.

Okupa vs Ocupa

     En primer lugar, resulta de crucial importancia clarificar la diferencia existente entre los okupas, escritos con “k” y los ocupas, escritos con “c”. Así las cosas, se toma como referencia el libro escrito por Miguel Martínez López, bajo el rubro de “El movimiento okupa, prácticas y contextos sociales”. Se trata pues de una auténtica guía de referencia para un conocimiento profundo del surgimiento del fenómeno de la okupación en España.  

     Así bien, la okupación, tal y como incidíamos anteriormente, se refiere al fenómeno reivindicativo en el que se mortifica la especulación inmobiliaria y se aboga por el acceso a la vivienda universal. Por ende, se abomina el hecho de tener que facilitar un pago para poder acceder a un derecho que, según sus reivindicaciones, debería de ser totalmente gratuito. Desde el punto de vista legal, se suelen usurpar edificios abandonados o propiedad de bancos a modo de protesta y para la realización de actividades autogestionadas.

     Por otro lado, hallamos el fenómeno de la ocupación, escrito con “c”, el cual está más relacionado con la delincuencia organizada. En primer lugar, nos encontramos con las conocidas como “Las Mafias de la Ocupación”, auténticas organizaciones criminales que se dedican a la usurpación profesionalizada de inmuebles para obtener un lucro económico. Asimismo, dentro de esta ecuación también se hallan los ocupas, los cuales pese a tener capacidad económica para acceder a una vivienda, deciden ocuparla de manera totalmente ilícita.

¿Dónde surge el "Movimiento Okupa"?

     El “Movimiento Okupa” se trata de una actividad reivindicativa que aparece en España aproximadamente sobre el inicio de los años 80.  Dicho movimiento, de manera temprana permitió observar a la sociedad española cuáles eran las cualidades y las proyecciones sociales que trataba de desarrollar dicho fenómeno trasgresor. En primer lugar, un concepto básico del “Movimiento” en sus inicios fue el de “resistencia”.  Así las cosas, el “Movimiento Okupa”, siempre se ha regido bajo el lema de “Okupa y resiste”, buscando transmitir de este modo que a través de la “okupación” se puede generar una alternativa respecto al acceso tradicional a la vivienda, que se relaciona con la aportación de un pago para poder acceder a ella.  

     De esta manera, los okupas, se autogestionan y realizan sus propios proyectos de vida e intervenciones políticas, sin a priori ninguna dependencia. Además, según sus argumentaciones, también “resisten” gracias a las actividades que realizan dentro de los centros sociales a través de discursos, críticas y proyectos de contrainformación. Por otro lado, el concepto de “resistencia” también hace referencia al incansable compromiso que tienen todos aquellos activistas okupas, que pese a lo que auto perciben como una marcada represión y persecución de índole policial y judicial no han cesado en sus prácticas. Tal y como sostiene MARTÍNEZ LÓPEZ “(..) es preciso comprender la resistencia de las personas activistas en las okupaciones a considerarse parte de un “solo” movimiento social, a focalizar en la propia práctica de okupación sus proyectos de vida y de intervención política e, incluso, a reconstruir su historia de una forma más o menos sociológica[1].

     Otra característica básica del “Movimiento” es la del marcado carácter antisistema. Por descontado, el anticapitalismo okupa emerge con una clara oposición y rechazo hacia la especulación inmobiliaria, percibida ésta como una clara herramienta del capitalismo en aras de buscar un sometimiento de la población y de consolidar las desigualdades económicas y sociales entre la ciudadanía.

La actualidad del "Movimiento" en España

     Recientemente hemos sido testigos una vez más de las nocivas consecuencias de los radicalismos y del crecimiento exponencial de la polarización en España, específicamente en relación con el movimiento okupa-anarquista. De este modo, en Barcelona, concretamente en el barrio de la Bonanova, el día 11 de mayo de 2023, se respiró un clima de tensión y violencia debido al enfrentamiento vivido entre vecinos y los okupas del Kubo y la Ruïna (ambos edificios okupados pertenecientes al SAREB). Estos últimos, autodefinidos como resistencia anarquista en pleno corazón burgués de Barcelona[2]. Dentro de sus exigencias podemos hallar la disolución estatal y la entrega de armas, así como la paralización de todos los procedimientos abiertos de desahucios en territorio español[3]. Características que nos resultan familiares tras haber hecho hincapié en las características del “Movimiento” en líneas anteriores.

     Asimismo, la problemática de esta cuestión no radica en los idearios de los ‘okupas anarquistas’, ni mucho menos en la teoría de sus reivindicaciones, más bien el problema surge cuando además de la radicalización cognitiva -entendida ésta como la existencia de ideas justificadoras de la violencia para la consecución de un fin- se da un paso hacia la radicalización física violenta.  En este hecho en concreto se constata un uso de la violencia por parte de los okupas a modo de defensa de un ideario puesto que atacaron con cohetes artificiales, llegando inclusive a dañar a los vecinos[4]. Además, tal y como reporta la vecindad, éstos han traído al barrio suciedad, fiestas hasta altas horas de la madrugada, insultos, amenazas e incluso agresiones, llegando inclusive a hacer uso de hachas, palos y cuchillos a modo intimidatorio[5].  Acciones, a todas luces, totalmente abominables para una sociedad democrática y avanzada y que, paradójicamente, tal y como recalcan los vecinos del céntrico barrio barcelonés, gozan de una impunidad respaldada por un marco político proteccionista hacia tales actitudes[6].

La instrumentalización del "Movimiento" por parte de los ocupas ilegales

     La problemática del fenómeno de la okupación no radica únicamente en el modo, a veces violento, de ejecución de sus reivindicaciones, puesto que, también se han detectado corrientes delictivas que se esconden detrás de él, oportunistas y al acecho para lucrarse de estas precarias situaciones sociales. De este modo, se está observando cómo bajo el pretexto de la okupación se está produciendo un aluvión de prácticas delictivas que poco o nada tienen que ver con las bases y fundamentos del “Movimiento Okupa”.

     A colación, tras la crisis inmobiliaria del año 2008 aparecerían los conocidos como ocupas ilegales, que se tratan de grupos de personas que realmente no tienen una verdadera necesidad de vivienda, sino que más bien prefieren adoptar conductas que conculcan con las normas sociales en busca de un beneficio propio. “Se trata de gente que ni sabe ni quiere convivir, que ocupan los pisos “por la cara”[7], tal y como señala Sandra Rodríguez Loreto, la presidenta de una comunidad de vecinos de un barrio obrero de Tarrasa.

     En esta línea, estos ocupas ilegales estarían relacionados con la producción de múltiples acciones delictivas tales como delitos contra la salud pública, amenazas, daños, robos, extorsión etc. Estos grupos, también suelen tener un modus operandi definido, que normalmente se suele relacionar con la ocupación ilícita de un inmueble y la posterior producción de las mayores molestias posibles a los vecinos para que éstos, a consecuencia de una clara desesperación se vean obligados a la contratación de mediadores, o de empresas que se dedican a la “Desocupación”. Estos intermediarios suelen negociar con los ocupas con el pago de cantidades para que éstos abandonen las viviendas. Posteriormente estos grupos se asentarán en otros lugares en los que realizarán las mismas prácticas, lo que se convierte en una praxis en bucle.

Modus Operandi de las "Mafias de Okupación"

     La delincuencia organizada es dinámica, incapaz de descansar y totalmente adaptable a cualquier tipo de situación. A raíz del 2008 distintas organizaciones criminales observarían una clara oportunidad en el mercado de la vivienda para realizar sus particulares prácticas delictivas. La propia Exposición de Motivos de la Ley 5/2018, de 11 de junio, en relación a la ocupación ilegal de viviendas apunta el increíble auge de estos movimientos en España, “(…) es así como han aparecido también fenómenos de ocupación ilegal premeditada, con finalidad lucrativa y, que aprovechando de forma muy reprobable la situación de necesidad de personas y familias vulnerables han realizado actuaciones ilegales por motivaciones diversas, pocas veces respondiendo a la extrema necesidad[8]

     A propósito, la ocupación ilegal de viviendas se trata de un auténtico nicho de mercado para la delincuencia organizada. Y es que, al menos, el 75 % de las ocupaciones ilegales que se producen en Madrid están realizadas por grupos totalmente organizados. Estos datos fueron facilitados por la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa en el año 2017[9].

     De este modo, las “mafias extorsionadoras” consiguen sacar rédito de lo que a priori es una situación de grave precariedad para miles de familias que no tienen un techo bajo el que cobijarse. Si bien ya conocemos de qué son capaces estos grupos, resulta de crucial interés que, llegados a este punto, nos cuestionemos cómo actúan estas “mafias”, es decir, pasar a comprender su modus operandi.

     Expertos en la materia, como, Daniel Esteve, director de seguridad y propietario de la empresa “Desokupa”, en una entrevista concedida a los medios narra cómo actúan estas peligrosas organizaciones criminales. Según él, éstas, entran violentamente en los pisos, y se instalan con un colchón. Evidentemente, la intencionalidad de estos sujetos que han entrado no es la de vivir o asentarse en esas viviendas de manera indefinida, tal y como realizan los “okupas por necesidad”- entendidos estos como aquellos okupas que sí tienen una verdadera necesidad habitacional y bajos recursos-. En estos casos, las organizaciones criminales esperan la llegada del legítimo propietario para demandarle una cantidad de dinero si desea que éstos abandonen su vivienda[10].

    A su vez, la problemática de estas organizaciones se da, cuando algunos de los legítimos propietarios, al observar que no disponen de las herramientas jurídicas suficientes para afrontar la situación, acaban cediendo ante la extorsión y por tanto pagando las desproporcionadas cifras que exigen estos auténticos profesionales delincuenciales, retroalimentando así su negocio ilícito.

   En suma, las conocidas como “Mafias de la Ocupación” encontrarían a raíz de la crisis inmobiliaria del 2008 un auténtico nicho de mercado en el fenómeno de la ocupación ilegal. Estas “mafias” están totalmente organizadas y realizan estudios minuciosos de la situación inmobiliaria en cada zona.

Operación específica realizada por parte de las organizaciones criminales

     Por antonomasia, otra práctica habitual de estas organizaciones criminales se basa en engañar a aquellos sujetos más vulnerables de nuestra sociedad, induciéndoles a alquilar un inmueble- el cual ha sido ocupado ilícitamente previamente-. De este modo, estos sujetos con bajos recursos creen que están alquilando una vivienda en términos totalmente legales cuando no es así. Es por ello qué, automáticamente estas familias se convierten en lo que denominamos como “okupas por necesidad”[11]

   El modus operandi respecto a esta operación específica se basa en la usurpación de pisos vacíos por parte de las organizaciones criminales- normalmente propiedad de entidades bancarias- para, a posteriori, “alquilarlos o venderlos ilegalmente” a familias necesitadas.

     Respecto a la existencia de contratos diremos que, éstos son totalmente falsos, ya que los pisos suelen estar vacíos o, simplemente son propiedades de bancos, por lo que los “okupas por necesidad” que han sido engañados, realmente están abonando falsos alquileres que van directamente a los bolsillos de las organizaciones criminales.

     Así pues, otra actividad recurrente de estas “mafias” consiste en subarrendar o vender los pisos a los conocidos como “ocupas ilegales” que pese a tener capacidad económica para poder afrontar el pago de un alquiler rechazan realizar esta práctica.

Conclusión

     Crisis y pobreza son términos propulsores de movimientos radicales que buscan soluciones drásticas ante problemáticas complejas. El “Movimiento Okupa” actualmente está compuesto por una importante amalgama ideológica que no se corresponde a las dinámicas observadas en su génesis.

    Además, de manera sorpresiva y, sin previsión alguna, la delincuencia organizada comenzaría a introducirse en el “Movimiento”, con fines económicos y, alejados de la lucha social, basándose en el engaño como principal herramienta. Así pues, podemos observar una gran variedad de prácticas realizadas por parte de estas organizaciones fruto de la creatividad, profesionalización.

    Así las cosas, el surgimiento del “Movimiento Okupa” y de las “Mafias de la Ocupación” es un síntoma evidente de esa incapacidad Estatal para proveer a todos sus ciudadanos de viviendas dignas. En este sentido se detecta la falta de políticas públicas que fomenten las viviendas de promoción pública.

    En conclusión, los fenómenos anteriormente narrados, lejos de ir decreciendo, se siguen posicionando como una cuestión de rabiosa actualidad. Y es que, la imposibilidad de acceso a la vivienda continúa generando la existencia de movimientos reivindicativos de índole social contrarios al sistema. Además, paralelamente, las organizaciones criminales, marcadas por su carácter acomodaticio, siguen sacando beneficios económicos de lo que se trata de uno de los grandes problemas sociales que confronta España a día de hoy.

     Por otro lado, la solución respecto al problema de la vivienda no apunta a una fácil solución, hemos podido observar cómo inclusive este hecho ha sido objeto de debate parlamentario, sin que ningún partido, independientemente de su cariz ideológico, haya dado con la tecla para poder subsanar y erradicar tales conductas.

Bibliografía

[1]MARTÍNEZ LOPEZ, Miguel, ¿Dónde están las llaves? El movimiento okupa, prácticas y contextos sociales (en línea). Madrid: Los libros de la catarata, 2004, p.61 (consulta: 22 de mayo de 2023). ISBN: 84-8319-182-2. Disponible en: https://bit.ly/3d2vcsO

[2]ANÓNIMO. Los okupas de la Bonanova exigen a la SAREB parar el desalojo: «Atentamente, la resistencia anarquista del corazón burgués de Barcelona». En: 20minutos.es (en línea). (Madrid): 2023. (consulta: 20 de mayo de 2023) Disponible en: https://www.20minutos.es/noticia/5126881/0/los-okupas-de-la-bonanova-exigen-a-la-sareb-parar-el-desalojo-atentamente-la-resistencia-anarquista-del-corazon-burgues-de-barcelona/

[3]ANÓNIMO. Los okupas de la Bonanova exigen a la SAREB parar el desalojo: «Atentamente, la resistencia anarquista del corazón burgués de Barcelona». En: 20minutos.es (en línea). (Madrid): 2023. (consulta: 20 de mayo de 2023) Disponible en: https://www.20minutos.es/noticia/5126881/0/los-okupas-de-la-bonanova-exigen-a-la-sareb-parar-el-desalojo-atentamente-la-resistencia-anarquista-del-corazon-burgues-de-barcelona/

[4]SALAZAR, Miguel. Un vecino de Bonanova afectado por los okupas: «Llegaron a tirarme un cohete y me tuvieron que dar puntos de sutura». En: antena3.com (en línea). Madrid: 2023. (consulta: 21 de mayo de 2023). Disponible en: https://www.antena3.com/noticias/sociedad/vecino-bonanova-afectado-okupas-llegaron-tirarme-cohete-tuvieron-que-dar-puntos-sutura_20230510645b5e9af921370001aaebe5.html

[5]LEÓN, Sandra. El infierno de los vecinos de la Bonanova «aterrorizados» por los okupas: hachas, cohetes y acoso sexual. En: libremercado.com (en línea). Madrid: 2023. (consulta: 21 de mayo de 2023). Disponible en: https://www.libremercado.com/2023-05-11/el-infierno-de-los-vecinos-de-la-bonanova-aterrorizados-por-los-okupas-hachas-cohetes-y-acoso-sexual-7013500/

[6]LEÓN, Sandra. El infierno de los vecinos de la Bonanova «aterrorizados» por los okupas: hachas, cohetes y acoso sexual. En: libremercado.com (en línea). Madrid: 2023. (consulta: 21 de mayo de 2023). Disponible en: https://www.libremercado.com/2023-05-11/el-infierno-de-los-vecinos-de-la-bonanova-aterrorizados-por-los-okupas-hachas-cohetes-y-acoso-sexual-7013500/

[7]ANÓNIMO, Cataluña se convierte en un ‘paraíso okupa’ para mafias y caraduras que viven del cuento. En: Libremercado (en línea). (Madrid): 2017 (consulta 1 de mayo de 2023) Disponible en: https://bit.ly/2B0YwSp

[8]ESPAÑA. Ley 5/2018, de 11 de junio, de modificación de la Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil, en relación a la ocupación ilegal de viviendas. (internet). Boletín Oficial del Estado. 12 de junio de 2018. Núm.142 (consulta: 10 de mayo de 2023). Disponible en: https://bit.ly/2AaYYwK

[9]ANÓNIMO. Mafias de la «okupación». En: Abc (en línea). (Madrid):2017 (consulta: 3 de mayo de 2023). Disponible en: https://bit.ly/2M1eVIC

[10]Entrevista a Daniel Esteve (Desokupa). En: Youtube (en línea), 2020, (consulta el 23 de mayo de 2023). Disponible en: https://bit.ly/2TDTnG9

[11]95Mafia Okupa, En: Youtube (en línea), 2019 (consulta: 29 de mayo de 2023). Disponible en: https://url2.cl/pIbtI

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