Criptografía: historia y curiosidades. La importancia hoy en día.

Autor: Janira Pérez Sánchez

Mantener mensajes en secreto nunca ha sido una tarea fácil pero el ser humano siempre ha intentado elaborar nuevos métodos para conseguirlo. La criptografía se ha usado desde tiempos inmemorables para transmitir información de unos a otros sin que los posibles interceptores tuviesen acceso a ella. En este artículo hablaremos sobre la historia de la criptografía, algunos de sus términos más básicos para poder entender cómo funciona y la importancia que tiene hoy en día en las actividades más cotidianas que podamos imaginar.

 

UN POCO DE HISTORIA

Para entender que es la criptografía primero debemos saber de dónde proviene o donde se originó. Comunicarse de forma secreta a través de la ocultación de un mensaje se conoce como esteganografía, derivado de las palabras στεγανο(steganpos), que significa encubierto, y γραπτοζ (gráphos), que significa escritura.

Un ejemplo de esto lo encontramos en la antigua China donde escribían mensajes en seda fina que luego aplastaban hasta crear una pequeña bolita que era cubierta de cera, la cual posteriormente ingería el portador del mensaje y el resto todos sabemos cómo acaba. Este método ha llegado hasta nuestros días y es usado por traficantes para portar sustancias ilegales.

Con la llegada de los ordenadores se pasó a ocultar mensajes en contenidos multimedia, mezclando bits del mensaje original entre los bits del archivo, pero con la sofisticación de la tecnología, alguien concienzudo sería capaz de averiguarlos por lo que comenzó el estudio de la criptografía. La criptología procede del griego krypto y logos, que significa el estudio de lo oculto, lo escondido, y dentro de esta encontramos dos ramas, la criptografía y el criptoanálisis.

En el presente artículo nos centraremos en la criptografía, que es la disciplina encarga de esconder, ocultar, hacer inteligible el mensaje que queramos compartir entre personas, mediante un procedimiento que se conoce como cifrar. En contraposición tenemos a la otra rama de la criptología, el criptoanálisis, el cual se trata de romper ese cifrado para recuperar la información oculta.

Antiguamente, como hemos comentado, la criptografía se usaba principalmente para mantener mensajes importantes ocultos a terceros, sobre todo en tiempos de guerra, pero actualmente tiene otros propósitos:

  • Que el mensaje sea confidencial, es decir, que solo puedan acceder a él las personas que estén autorizadas para ello.
  • Que se garantice la autenticidad tanto del destinatario como del remitente, es decir, comprobar la identidad de ambos.
  • Que el mensaje llegue íntegramente al receptor, es decir, que el mensaje enviado por A sea el mismo que recibe B.

 

TÉRMINOS Y CURIOSIDADES

A continuación, vamos a comentar algunos términos que serán de gran utilidad a la hora de comprender mejor como funciona esto de la criptografía.

Para comenzar tenemos que saber que existen dos métodos de criptográficos dependiendo del tipo de clave que se utilice:

  • Sistema de clave privada o método simétrico, son los métodos que utilizan una única clave tanto para cifrar como para descifrar el mensaje.
  • Sistemas de clave pública o asimétrica, se tratan de métodos en los que los procesos de cifrar y descifrar se llevan a cabo con dos claves, una pública y una privada, las cuales son complementarias.

 

Dentro del cifrado simétrico encontramos dos tipos de algoritmos:

  • Cifrado en bloque: consiste en cifrar el mensaje original agrupándolo en bloques de un tamaño determinado, por ejemplo 128 bits.
  • Cifrado en flujo: consiste en cifrar el mensaje original bit a bit o byte a byte.

 

Dentro del cifrado de clave pública o asimétrica encontramos dos métodos:

  • Cifrado por sustitución: consiste en ir sustituyendo cada letra del alfabeto en el que está escrito el mensaje que queremos enviar y los elementos de otro alfabeto pudiendo ser el mismo o no.
  • Cifrado por transposición: se trata de reorganizar las letras del texto claro y colocarlas en una posición distinta, de esta forma, el mensaje cifrado contiene los mismos caracteres que el mensaje original, pero en distinta posición.

 

Estos dos métodos de cifrado eran usados en la criptografía clásica, ya que actualmente, casi cualquier persona, en un periodo de tiempo relativamente corto, podría obtener un mensaje original que esté cifrado por sustitución o transposición.

 

IMPORTANCIA HOY EN DÍA EN LA CIBERSEGURIDAD

Como hemos visto, la criptografía se ha utilizado desde hace miles de años, y actualmente está cada vez más presente en nuestro día a día, aunque la mayoría de las veces no nos damos cuenta.

Esto ocurre por ejemplo cuando compramos a través de internet y pagamos con nuestra tarjeta del banco.

Por ejemplo, cuando accedemos a nuestro correo electrónico, a través del navegador podemos encontrar un candadito en la parte superior de la barra del dominio, esto quiere decir que estamos navegando por una página cifrada, pero esto tampoco quiere decir que estemos enviando la información a la persona que deseamos, ya que alguien ha podido interponerse entre nosotros y el destinatario y recibir la información.

La criptografía también está presente cuando realizamos acciones con la Administración Pública, a través de la firma o el DNI electrónicos.

En la simple acción de mandarnos mensajes a través de la conocida app WhatsApp estamos haciendo uso de la criptografía ya que las comunicaciones están cifradas de extremo a extremo, este tipo de cifrado garantiza que solo tú y la persona con la que te estás comunicando podáis leer o escuchar lo que estáis enviando y ni siquiera WhatsApp tiene acceso a esa información.

Como podemos deducir la criptografía es también una herramienta muy importante en el ámbito de la ciberseguridad.

Actualmente la mayoría de los trabajos están industrializados e informatizados de alguna forma, lo que conlleva un aumento del riesgo de sufrir ciberataques, por ello, el uso de la criptografía sobre las comunicaciones o sobre los dispositivos que se utilizan en las empresas es una medida extra de seguridad que siempre puede reducir los ataques.

Por ejemplo, existen certificados para la autenticación de los dispositivos a través de los cuales seremos capaces de saber quiénes están detrás de cada dispositivo que hay conectado a nuestra red y así poder evitar amenazas.

 

CONCLUSIÓN

En un mundo prácticamente informatizado, en el que los principales activos de las empresas y de las personas son la información, ya sea privada, como datos bancarios o información confidencial como estrategias de mercado, necesitamos de la criptografía junto con la ciberseguridad para que las comunicaciones y el traspaso de información sea lo más seguro posible y no existan intermediarios que intenten acceder a ella o directamente robarla.